domingo, 10 de agosto de 2008

Bahía de Halong

11-05-2008

Nos levantamos a las 6:30 y desayunamos en el hotel (el desayuno estaba incluido). Hablamos con el personal del hotel para dejar las mochilas grandes allí mientras estemos en la Bahía, y nos vamos con las pequeñas. A las 8:15 nos pasan a recoger, y seguimos recogiendo a más gente.
Después de tres horas y media dando botes y pitidos, llegamos a la Bahía de Halong. Esperamos un rato y embarcamos en un barco con ocho habitaciones. Éramos quince viajeros, más la tripulación. En el reparto de habitaciones me toca compartir con un canadiense de origen vietnamita. Como compañeros de viaje tenemos: tres canadienses, una pareja de australianos, otra de israelíes, dos de ingleses y un australiano solitario.

Comemos en el barco (donde si no). No es ninguna maravilla, pero quita el hambre. Las bebidas no están incluidas y son bastante caras: 2.5$ la cerveza y 3$ la botella grande de agua.
Por la tarde paramos a ver unas cuevas muy grandes que están bastante bien, en las que hay que subir y bajar unos tramos de escaleras bastante curiosos.

Continuamos y paramos poco después en una isla. Nos dan dos opciones: quedarnos en la playa o subir hasta la cima por escaleras para ver una pagoda. Creo que no hace falta ni decir lo que decidimos casi todos. Después de una hora en la playa, volvimos a embarcar y echamos el ancla muy cerca para ver anochecer y quedarnos allí hasta la mañana siguiente. Cenamos (lo mismo que nos pusieron a la hora de comer), tomamos unas cervezas y nos acostamos.

12-05-2008

A las 8 de la mañana nos juntamos todos en el comedor del barco para desayunar. Después, tomamos rumbo a una isla en la que hacemos un paseo en bicicleta. En principio es un paseo de una hora, pero resulta ser de quince minutos de ida, media hora de descanso y otros quince minutos de vuelta. Las bicicletas están en un estado un poco penoso: los cambios no funcionan y en cuanto haces un poco de esfuerzo la cadena hace amagos de salirse, pero por lo menos es de mi talla. Después de este paseo, volvemos al barco, comemos y seguimos navegando hasta llegar a una casa flotante. Bajamos en esta casa y nos subimos en unos kayak que nos tenían preparados para hacer un recorrido bastante bonito de hora y media.

De vuelta en el barco, paramos en la isla de los monos (Monkey Island!!!) para darnos un baño, y finalmente llegamos a la isla de Cat Ba a media tarde. Nos llevan a nuestro hotel, que está bastante bien, y nos registramos. Decidimos ir a dar una vuelta y tomar algo antes de cenar. A las 19 cenamos todos juntos en el comedor del hotel y después salimos casi todo el grupo a tomar algo a un sitio recomendado por el guía. Sobre las 2 de la madrugada, después de varias cervezas y de dar unas clases de futbolín a unos australianos desafiantes, nos fuimos a la cama.


13-05-2008

Salíamos a las 8, así que nos levantamos a las 6:30, nos duchamos y nos fuimos al comedor a desayunar. No había nadie de nuestro grupo, la noche les había sentado muy mal. El desayuno estaba bien, era un buffet bastante decente. A las 8 salimos casi todos (la pareja de australianos se quedaban una noche más en Cat Ba) hacia el embarcadero, donde embarcamos y nos emprendimos el viaje de vuelta. Cuando llevábamos aproximadamente una hora, cambiamos de barco. Este segundo barco iba mucho más despacio.

Supusimos que tendría algún problema, ya que además de ir despacio, llegamos una hora tarde al destino.
Cuando llegamos al puerto, nos recogieron en un bus y nos llevaron a comer a un restaurante cercano. Después de comer, emprendimos la larga vuelta hacia Hanoi... tres horas dando botes en un minibús. Pasadas las cinco de la tarde llegamos a Hanoi y nos fueron dejando en los hoteles. Cuando llegamos al nuestro, recogimos los equipajes que habíamos dejado y volvimos a la misma habitación, donde nos habían puesto dos de las camas juntas. Supusimos que sería una broma, así que las separamos y pensamos que ya llegaría nuestro turno de ser los bromistas...
Salimos a dar una vuelta y cenar, y nos acostamos pronto, porque al día siguiente nos tocaba otra vez excursión.